Sunday, July 31, 2016

Como saber que has madurado como bebedor.



Sales con tus amigos, alguien amado, o probablemente solo, y cuando te sirven la bebida que pediste o que obtuviste gratis en una fiesta y das el primer trago, te das cuenta que no te atrae (la bebida). Vuelves a tomar otra vez, y sigues teniendo la misma reacción. A pesar del hecho que este brebaje esta hecho con alcohol, no es algo que quieras tomar. Te dices a ti mismo, “no vale la penas las calorías”, y en lugar de tomarlo, colocas la bebida en la mesa y te retiras. Felicidades. Éste es uno de los signos claros que has madurado como bebedor.

Hubo probablemente alguna vez en tu vida que cada bebida se sentía como si fuera la última. Aún si era una cerveza mala o un cóctel que estaba demasiado dulce, ¿Quién sabe cuando podrías tomar otro? Así que no hay manera en el mundo que no lo pudieras tomar. Hubo un momento en tu vida como bebedor cuando el alcohol se sentía como el producto de lujo, algo que no debería desperdiciarse, aún si no disfrutáramos completamente la bebida. Conocemos esa persona que por lo regular grita cuando se tira al fregadero la cerveza o el vino al final de la noche.

Pero como bebedores maduros, un de los puntos clave que determina que hemos llegado a la edad es nuestra habilidad de dejar la bebida en la mesa e irse. Seguro, a nadie le gusta desperdiciar las cosas, pero en el esquema grande de las cosas te das cuenta que te sentirás mucho mejor bebiendo algo que realmente disfrutas que tomar algo que por el acto simple de tomar.

Sin embargo, con ésta nueva habilidad de retirarse también viene una nueva responsabilidad, de no parecer un esnob (persona socialmente presumida) mientras lo haces. Ésto puede ser un asunto un poco complicado; dejar una bebida en la mesa que no disfrutas no significa que a otra persona no le guste. Así que no hagas un evento público el hecho que dejes el liquido y, Dios no lo permita, no expreses a viva voz que no vale la pena las calorías. Para existe los pensamientos privados. En lugar de ello, busca un lugar donde puedas poner tu bebida de manera casual y busca algo distinto.

El escenario anterior trabaja bien si estás en una fiesta, sin embargo, si estás en un restaurante o bar, ponte las pilas por el simple hecho que estás sentado en una mesa o te está atendiendo el mixólogo, por lo que salirse caminando no es el mejor consejo. Aun cuando no quieras la bebida, botar la cuenta de consumo nunca será la mejor idea. En lugar de ello, solo comenta al mesero que estás tomando algo que no es lo que pensabas que sería. No tienes que decir que odias la bebida pero puedes ser honesto que no lo estás disfrutando. Muchos lugares reemplazan la bebida, y no desperdiciarás energía.

Fuente:
http://vinepair.com/articles/the-way-you-know-youve-matured-as-a-drinker/
Autor: Adam Teeter (http://vinepair.com/author/adam/) Tweeter: @adamteeter
Publicado: July 25, 2016
Traduccion: Herencia Culinaria